Desde el año 1977 que se inventó, por parte de una empresa sueca los suelos laminados, los avances en este tipo de suelos no ha dejado de sorprender, aportándole cada día nuevas características para hacerlos más bellos y sostenibles.
Los suelos laminados son más resistentes que los suelos de madera. No necesitan tampoco tanto mantenimiento, ya que soportan muy bien todo tipo de manchas, arañazos y humedades. Son más económicos y hoy en día se puede disfrutar de un efecto tan similar a la madera natural que es muy difícil saber diferenciarlo. Esto es debido a la composición de este tipo de suelos.
Los suelos laminados son fabricados mediantes diferentes capas, que en conjunto le aportan sus cualidades técnicas finales. En la mayoría de los suelos laminados, están fabricados mediante las siguientes capas:
Esta base de fibras se convierten en láminas, después de haberlas sometido a una alta presión. En su superficie se le aplica la capa de impresión con el dibujo o fotografía, y a esta se la añade encima la capa de desgaste transparente, que la protegerá de las manchas, arañazos, humedad y rayos UV.
El suelo laminado aunque es muy resistente a la humedad, se debe de retirar de inmediato el agua o líquido, para que no ocasione daños. Teniendo esto en cuenta, podemos disfrutar de un suelo muy duradero y que imita de manera perfecta, a los hermosos y delicados suelos de madera natural.
La Firma FINSA es fabricante de una gran variedad de productos derivados de la madera. Entre muchos de sus productos, nos ofrece infinidad de suelos laminados de altísima calidad y belleza.
Tanto en el hogar como en todo tipo de negocios, este tipo de suelos se instalan de la misma forma que los suelos flotantes. La mayoría de ellos utilizan sistema clic, por lo que además de ser sencilla y rápida su instalación, permite colocarlo encima de un suelo ya existente.
Entre los diferentes suelos laminados para uso comercial, se encuentra el FINfloor Clase 33, una opción muy interesante. Se trata de una colección recomendable para zonas donde hay mucho tráfico como por ejemplo en la recepción o vestíbulos de hoteles, clínicas, residencias, comercios, oficinas, etc., ya que soportan muy bien el desgaste y la abrasión, por su gran resistencia.
La resistencia y durabilidad de los suelos laminados, sólo requiere de un mantenimiento adecuado para poderlo disfrutar a lo largo de los años. Solamente hay que tener en cuenta, no emplear para su limpieza, elementos que lo puedan rayar como cepillos o escobas, y usar mopa o aspiradora con cepillos suaves. En caso de manchas, estas se pueden retirar con cualquiera de los muchos productos neutros, que existen en el mercado.
Este tipo de suelos laminados cuentan con infinidad de diseños, tonalidades y texturas, por lo que combinan muy bien con cualquier ambiente. Para que el diseño sea lo más fiel a la textura de la madera elegida, se utiliza el acabado Wood Impresion, que lo reproduce a la perfección.
Se puede elegir en cualquiera de estos catálogos:
Todas estas gamas de suelos laminados, ofrecen además de la gran resistencia al desgaste AC5 y clase de uso 33, distintos largos, anchos, grosores, biselados, colores, etc. por lo que son idóneos para todo tipo de proyectos.
Los que tienen un acabado sin bisel, ofrecen una mayor duración, por lo que son más idóneos para su utilización en lugares comerciales.
Además de la belleza y el confort que en la actualidad ofrecen los suelos laminados, se suma que es un producto totalmente reciclable, renovable y sostenible, por lo que contribuye a la mejora del medio ambiente.
Imágenes Finsa: Proveedor de Gescom en productos de suelos laminados.
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