Principios generales sobre la corrección acústica
La corrección acústica permite garantizar la calidad y el confort acústico propio de un local. Este puede ser tanto en un lugar donde se debe favorecer la escucha: Salas de espectáculo, aulas de enseñanza, salas de reunión… Locales industriales, oficinas, zonas comunes de circulación…; como en un lugar acústico específico, es decir, un lugar donde se debe disminuir el nivel sonoro y donde se debe favorecer la escucha a corta distancia al mismo tiempo: salas de deporte, restaurantes…
La obtención de una buena corrección acústica depende, por un lado, del volumen y de la forma del local y, por otro lado, de la calidad de las paredes que lo delimitan, y en particular de los materiales dispuestos sobre dichas paredes.
Algunas nociones sobre la propagación de la energía sonora
Absorbente acústico
Un material absorbente colocado en una pared disminuye la cantidad de energía reflectada dentro de la misma estancia. La energía transmitida hacia la estancia de al lado seguirá siendo la misma.
Un absorbente acústico atenúa el fenómeno de reverberación del sonido en una estancia (evita el fenómeno de eco).
Cuanto más lisas y duras son las paredes (vidrio, mármol, acero), más reflectantes serán. Al contrario, cuanto más porosas sean, mejor será la absorción.
Coeficiente de absorción alfa e índice de absorción ponderada alfa w
Cuando una onda sonora golpea la pared de una habitación, la pared reflecta una parte de la energía incidente, mientras que absorbe una segunda parte y transmite una tercera.
La absorción de la pared, en particular del material de su superficie, se caracteriza por un coeficiente de absorción alfa. Se trata de la relación entre la energía absorbida y la energía incidente. Por ejemplo, si a una frecuencia determinada el material absorbe al 60% de la energía incidente decimos que su α = 0,6.
La absorción de las paredes es diferente según las frecuencias sonoras. Por tanto, es necesario definir los coeficientes de absorción en función de las distintas frecuencias. En general, vienen representadas por franjas de octavas.
El comportamiento general de un material absorbente se expresa mediante el valor de su Alfa W (α w), que es el índice de absorción acústica ponderado (medido con un conjunto de frecuencias representativas).
Las clases de absorción acústicas de un material se definen por la norma NF EN ISO 11-654
(Los revestimientos murales de Texdecor tienen una clasificación E, ya que su comportamiento se sitúa entre α w 0.15 y α w 0.25).
La duración de la reverberación
Cuando, en una estancia, la emisión de ruido cesa, observamos que el ruido se reflecta en las paredes durante un tiempo determinado. Esta cola sonora, denominada reverberación, será más larga cuanto mayor sea el volumen del local y cuanto más lisas y duras sean las paredes.
La duración de la reverberación Tr de una estancia es el tiempo que tarda el sonido para que su nivel de intensidad disminuya de 60dB tras la interrupción de la fuente sonora (lo que significa que la energía es una millonésima parte de lo que era al principio).
Esta duración de la reverberación está vinculada a la vez a la capacidad de absorción del local y a su volumen. Y se calcula mediante la fórmula de Sabine: Tr = 0.16 V / A
Tr: Tiempo de reverberación en segundos
V: Volumen de la estancia en m3
A: Área de absorción equivalente en m2 (superficie X alfa W)